"Yo solo tengo problemas con los fachas"
Leo Bassi
Horas antes de atender esta llamada
telefónica sobrevoló Canarias como pasajero de un vuelo que le traía de
vuelta a España tras completar una gira por tierras brasileñas. "Si lo
sé me tiro en paracaídas", cuenta con un tono en el que todavía no se
percibe el histrionismo que abandera el actor y cómico italiano Leo
Bassi (1952). "Prefiero que me tomen por un loco a tener que vivir de
rodillas", asegura el artista que el viernes, a partir de las 21:00
horas, tomará el teatro Leal de La Laguna con el espectáculo "BEST OF
BASSI by Leo Bassi (B.O.B.)".
¿Canarias no es un territorio "virgen" para su humor?
Voy mucho, la verdad... Aún me queda por
conocer El Hierro, pero el resto del archipiélago lo conozco. ¿Sabe lo
que más me sorprende de los canarios?
Dispare...
Me llama la atención el hecho de que los
canarios, que tienen un ritmo biológico aparentemente más lento que el
de los italianos, tienen un sentido del humor realmente exquisito. No
lo digo por quedar bien, me gusta el tono irónico y crítico con el que
abordan algunos temas... No sé cómo lo llaman ustedes.
¿Socarronería?
Eso, "socarronetería"...
¿Lo de descubrir El Hierro está en sus planes?
Todos hablan maravillas de esa pequeña
Isla y le voy a confesar una cosa: Leo Bassi tiene alma de
coleccionista, es decir, que esa colección no va a estar completa hasta
que actué en El Hierro. Hay algo en sus volcanes que atrae mi
curiosidad.
Isla de El Hierro
¿Usted también tiene algo de volcánico?
Aparento tranquilidad, pero en cuanto me
enciendo tiemblo con la fuerza de un volcán. Eso es algo que agita al
doctor Jekyll y el señor Hyde que domina mi personalidad. Mi lema es que
solo se vive una vez.
¿Leo Bassi es una especie de "equilibrista" del riesgo?
Si hay un público que me ama, porque
existe otro que me odia a muerte, es por mi sinceridad y por la
coherencia que tienen las cosas que hago y que digo...
Genéticamente usted estaba destinado a acabar cerca de los escenarios, ¿no?
Fui educado para ser un malabarista o un
payaso, pero tengo la impresión de que decepcioné a muchos de mis
antepasados. Ellos defendieron con su vida un oficio que les permitió
conocer mundo sin tener una sola patria.
En el Vaticano, al revés de la convulsión que ahora domina el mundo en general, hay un hombre que transmite normalidad.
Lo que está pasando en la iglesia católica es una revolución y jode a los sectores más conservadores del mundo.
Raúl Castro y el Papa Francisco
¿No me irá a contar que el papa Francisco lo ha convencido?
Ese hombre está arriesgando su vida con
cada gesto y eso le puede acabar pasando factura... Ya ocurrió en el
caso con otros. Algunos aún tienen sus intestinos revueltos después de
oír el buen rollo que hay entre Raúl Castro y el papa Francisco. ¿Usted
es capaz de imaginar lo que pueden estar pensando los del opus dei, los
Aznar, los franquistas y fachas en general ante la posibilidad de ver a
Castro y Francisco bailando?
¿Medio convencido sí que lo veo?
Yo no tengo nada contra los cristianos
cuando son sinceros y este señor me parece un ejemplo de sinceridad. Lo
que no me cuadra es que hablen de los humildes y luego se vayan de
copas con fascistas y propietarios de áticos de lujo. La única
diferencia que hay entre el papa Francisco y yo es que yo no soy
cristiano... Yo solamente tengo problemas con los fachas; con los fachas
ateos, con los fachas católicos o con los fachas musulmanes... Un facha
es fácilmente reconocible en cualquier orden de la vida.
¿No le intimidan los ataques que ha sufrido, verbales y físicos, por apostar por una línea tan crítica?
No... Hace tiempo que me autoconvencí de
que no quería vivir de rodillas y sintiendo miedo. Sí sé que hay
corrupción y me callo estoy aceptando una situación que para mí es una
humillación. Insisto, prefiero que me tomen por un loco a tener que
vivir de rodillas.
¿Se siente perseguido?
En los últimos cuatro años del Partido
Popular no he recibido ni una sola subvención y cuando consigo un
contrato privado se movilizan con fuerza para ver si de alguna manera me
pueden quitar de la programación. Sí. Creo que soy un artista
incómodo...
¿Jamás se autocensuró?
Nunca ha valorado el daño que podían hacer
mis palabras desde el punto de vista político. Si digo algo es porque
estoy convencido de que ese es mi sentido de la justicia.
¿Ese "show-crazy" con el que envuelve sus espectáculos es una filosofía de vida?
Amo la vida; no me considero un artista
maldito y tampoco lloro mis derrotas... Yo vivo cojonudamente, aunque
haya días en los que me sienta una mierda. La única forma que conozco
de materializar la alegría que siento por estar vivos es comportándome
como un payaso. Hay un demonio dentro de mí que saca todo eso fuera: eso
es algo que ni puedo ni quiero controlar... Este viejo cómico se irá de
este mundo así; con una sonrisa en mi cara.
¿Pero existe o no una línea divisoria que separa al personaje de la persona?
Le voy a decir una cosa. En el escenario
soy más yo que fuera de él... El Leo Bassi de verdad es el que se sube a
una tarima; el otro está deseando con todas sus fuerzas que eso pase
para liberarse de algunas ataduras que no me gustan.
FUENTE: eldia.es
Cultura y espectáculos
Jorge Dávila - Santa Cruz de Tenerife
13/05/2015
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