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27/10/18

AZNAR PROFETA

El futuro es ayer y Aznar es su profeta


José María Aznar

Ya hemos advertido anteriormente del peligro que correría el mercado editorial si Aznar despachara libros al mismo ritmo que castiga abdominales. Afortunadamente, Jose Mari cada vez habla más para adentro, concretamente entre la nuez y el epigastrio, y el monólogo interior tarda lo suyo hasta que encuentra el camino de salida.

Aun así, sus obras van amontonándose una detrás de otra, redondas y perfectas como las bolas de un escarabajo pelotero. Libro a libro, Aznar da la impresión de estar a punto de inaugurar un nuevo género literario, uno en el que cualquier día podría empezar a escribir con goma de borrar, un ejercicio zen que sus lectores nunca le agradecerían bastante.


Su reciente comparecencia ante la comisión de investigación del Congreso fue apenas el aperitivo de la gira de promoción de su última entrega narrativa, una fascinante novela de ciencia-ficción en la que España no participó en la guerra de Irak; Zaplana no fue acusado por los delitos de falsedad, cohecho, prevaricación, blanqueo de capitales y pertenencia a organización criminal; Podemos ha sido financiado con capital iraní y venezolano; y el PP es un partido honrado a carta cabal, más limpio que el currículum de Pablo Casado.

Los críticos que acudieron en su día al aperitivo se encontraron con que, efectivamente, Jose Mari estaba dando a luz una nueva forma literaria: las posmemorias, que son a las memorias lo que el alzhéimer a una pedorreta.


La última donación de Aznar al noble arte de la papelería consiste en un volumen titulado "El futuro es hoy" (editorial Planeta) donde las mentiras empiezan por el título. Entre otras acuciantes cuestiones, el libro habla de la corrupción, la situación en Cataluña, el desafío de la economía china, la revolución tecnológica, la amenaza del populismo, la crisis del neoliberalismo y los retos que nos plantea el futuro.

También es una de las pocas ocasiones donde el preclaro adalid del mundo occidental admite que pudo haber hecho algo mal durante la guerra de Irak: “Nuestro principal error no fue querer derrocar a Sadam Hussein, sino suponer que su derrocamiento produciría automáticamente un cambio de gobierno hacia la democracia liberal y, en consecuencia, una transformación de Oriente Medio que lo encaminaría hacia la paz durarera”. Creer que cientos de miles de iraquíes asesinados iban a producir “automáticamente” la democracia y la paz -igual que una plantación de cadáveres regada con toneladas de explosivos- da una idea de la audacia y la profundidad del pensamiento político y ético de Jose Mari.

La destrucción de Irak

En estas coordenadas de progreso mental hay que situar las recientes declaraciones de Aznar al ser entrevistado por otra de las grandes innovadoras de la literatura en castellano, Ana Rosa Quintana, una autora que realizó la increíble proeza de plagiar el libro de otra autora sin haberlo leído primero.

En ese ambiente de tertulia cultural que únicamente puede alcanzar Tele5, Jose Mari hizo un encendido elogio del líder del Vox, Santiago Abascal, asegurando que se trata de “un chico lleno de cualidades”, aunque no especificó exactamente cuáles. Aznar dice que el futuro del PP pasa por la extrema derecha de Abascal del mismo modo que Abascal pasó por el PP, sus hipotéticos votantes por las urnas de Génova, las armas de destrucción masiva por su imaginación y los monos de Gibraltar por la corona española.

Aznar y Abascal

FUENTE: publico.es
Punto de fisión
David Torres
22/10/2018

A este ciudadano, 
el tándem Aznar-Abascal
le resulta harto peligroso.

21/4/18

LA POSICIÓN GEOESTRATÉGICA DE SIRIA


Siria, país situado en Oriente Próximo, en la costa oriental mediterránea del continente asiático, mantiene fronteras con Turquía, Irak, Jordania, Líbano e Israel, lo que lo convierten en un enclave estratégico de primer orden codiciado por las grandes potencias extranjeras.

Siria es una república árabe, miembro de las Naciones Unidas desde su fundación. Posee una población aproximada de 23 millones de habitantes. Su religión mayoritaria es la islámica (principalmente sunnitas) y su idioma el árabe, aunque existen otras minorías étnicas como asirios, armenios, turcos y kurdos.

 Niños sirios exiliados en Líbano

Con la caída del Imperio Otomano tras la Primera Guerra Mundial, emerge el moderno estado sirio bajo tutela del gobieno francés, hasta que finalizada la segunda Segunda Guerra Mundial en 1945, obtiene la independencia y se convierte en república parlamentaria. Formó parte junto con Egipto de la efímera R.A.U. (República Árabe Unida) que acabaría con el golpe de estado en Siria en 1961. Tras un referéndum constitucional se crea la República Árabe Siria hasta que un nuevo golpe de estado en 1963 lleva al poder al Partido Baath Árabe Socialista.

Desde principios de la decada de los 70, la presidencia de Siria ha sido ejercida por miembros de la familia Asad; el primero el general Hafez al-Asad, jefe de Estado desde 1970 hasta 2000, seguido por su hijo Bashar al-Asad, actual presidente del país.

Bashar al-Asad, presidente de Siria

En diciembre de 2010 comienza en Túnez la Revolución de los Jazmines, que marcó el inicio de la conocida como Primavera Árabe, que se extendería por los países del norte de África y Medio Oriente, motivada por las pésimas condiciones de desempleo, corrupción y represión ciudadana, lo que llevó en 2011 al pueblo sirio a manifestarse contra el gobierno de Bashar al-Asad, degenerando posteriormente en una guerra civil.

Durante el levantamiento, el gobierno sirio tildó a la oposición de revolucionarios que tratan de desestabilizar el país, mientras que los líderes de la oposición dicen que solo es una justificación para los ataques del régimen.


Estados Unidos y algunos de sus aliados occidentales han impuesto sanciones económicas a Siria, exigiendo a Bashar al-Asad que abandone el poder. Sin embargo, no han logrado convencer al Consejo de Seguridad de la ONU, ya que, Rusia y China, dos de los socios comerciales de Siria, vetaron varias de las resoluciones propuestas.

Un ataque químico efectuado en septiembre de 2013 estuvo a punto de provocar una intervención militar occidental, pero una controvertida respuesta diplomática rusa logró llevar a cabo la destrucción de las armas químicas sirias; no obstante la guerra prosiguió.

Vladimir Putin y Xi Jinping, presidentes de Rusia y China, países aliados de Siria

En 2014, al-Asad se postuló por tercera vez para la presidencia, en medio de un sangriento enfrentamiento para que deje el cargo. Se han comprobado torturas, asesinatos, fusilamientos, violaciones y saqueos perpetrados tanto por el bando gubernamental de Bashar al-Asad como por el bando rebelde apoyado por EE.UU. y Arabia Saudí, llegando a ser estos crímenes de una violencia extrema, sobre todo desde la entrada en escena del Estado Islámico.

En 2014 Siria acercaría posturas con Estados Unidos y el país norteamericano accede a bombardear posiciones del Estado Islámico pero sin resultados efectivos. No fue hasta que Rusia dió un verdadero golpe de mano que el Estado Islamico comenzó a resentirse, tal vez porque a otros no les interesaba debilitarlo demasiado.

Mercenarios del Estado Islámico (Daesh)

Como represalia ante un supuesto ataque del régimen sirio con armas químicas sobre la población de Duma, el 14 de abril de 2018, EE.UU. con el apoyo de Reino Unido y Francia, bombardea el Centro de investigación científica de Barzeh en la capital de Siria.

Mientras tanto, todo este merecumbé tiene un espectador de excepción que, entre las sombras, se frota las manos porque sabe que tiene el control de Oriente Medio con el beneplácito de las potencias occidentales: El gobierno de Israel.

Benjamín Netanyahu, jefe del gobierno israelí

Citizen Plof

24/8/17

EL BUFÓN Y EL IMPERIO

¡Atención! Un bufón comanda el imperio


EEUU siempre ha tenido el temor de no lograr mantener dos guerras a la vez. En el entusiasmo del consenso logrado para invadir y destruir a Afganistan – chivo expiatorio de los atentados a las Torres Gemelas, para librar de responsabilidades a Arabia Saudita, su aliado carnal -, el Gobierno norteamericano se lanzó, en ese momento solo con el apoyo de Reino Unido, a invadir y a destruir el país de la mas antigua civilización del mundo, Irak. Media década después, todavía continúan allí. No han logrado salir de ninguno de los dos países, a pesar de haberlos destruido.

Ahora, Donald Trump, que dirige el Imperio por twitter, dio dos declaraciones explosivas, a su más puro estilo. Dijo que Corea del Norte será victima del mayor y brutal ataque que el mundo ha conocido y, no contento con ello, de que contempla la posibilidad de una “solución militar” en Venezuela.


La Agencia Reuters dijo que hay una vía de comunicación directa y secreta entre Corea del Norte y los EEUU, una especie de teléfono rojo o amarillo. El New York Times alineó las razones por las cuales EEUU no se meteria con Venezuela: perdida de ganancias de empresas petrolíferas norte-americanas, mayor costo al tener que  importar petróleo de otros países mas lejanos, además de las reacciones, que generarían mayores apoyos al Gobierno venezolano.

Pero Trump ya ha jugado con apretar el botón de la guerra, bombardeando a Siria y a Afganistán. Le gustó y tuvo apoyos dentro y fuera de EEUU, después de la operación de algunos medios sobre las crueldades que el gobierno de Assad habría cometido y que llevaron a Trump casi a las lágrimas. No fue necesario nada de ello para tirar "la madre de todas las bombas" en Afganistan.


Racionalmente, nadie tomaria en serio a los EEUU, empantanado aún en Irak, Afganistán y Siria,  metiéndose a luchar contra Corea del Norte e invadiendo Venezuela, a la vez. Pero el hecho de ser el presidente con menor apoyo en los primeros seis meses de mandato, puede incitar a Trump a montar operaciones para sembrar de miedo – como la que él hizo sobre Siria, mosatrando sus lágrimas con la exhibición de escenas de crueldad atribuidas al gobierno de Assad – para justificar alguna operación que, cree el, pueda aumentar su apoyo interno y mostrar al mundo que el está todavía al mando del mundo.

Después de tantas barbaridades por parte de Trump, ya hay quienes no dudan que pueda meterse en alguna nueva aventura contra Corea del Norte. Y que pueda querer “dar una lección” a Venezuela, valiéndose del del clima favorable en el continente, antes de que pueda producirse, por ejemplo, el eventual retorno de un gobierno hostil al imperio capitalista en Brasil.


Lo cierto es que un bufón, un boquirroto, está en el comando del Imperio y tiene el botón nuclear al alcance de su dedo y de su Twitter. Ésa es la contribución actual de EEUU al restablecimiento de la paz mundial.

Su solución no resultó en Siria y tampoco ha logrado llevarla a la  práctica en contra de Irán. Fue Rusia quien  salió fortalecida, como la gran adversaria del EI (Estado Islámico). Todo le ha salido mal al Imperio Americano. EE.UU. ha quedado desligitimado como valedor de las libertades, ante la opinión pública mundial, principalmente, por su estrecha relación con Arabia Saudí, país promotor del apoyo al terrorismo del Estado Islámico, no solo en Oriente Medio, sino a nivel internacional.


La locura de un ataque estadounidense contra Venezuela podría tener consecuencia imprevisibles, que se propagarían por todo el continente. Hasta la misma OEA se vio obligada a condenar las declaraciones de Trump, lo mismo que hizo Vicente Fox.

Hacerlo también contra Corea del Norte no podría sino tener efectos graves, con repercusiones sobre Corea del Sur, aparte de que ambos países resultarían ingobernables. Actuar contra Venezuela podría provocar un nuevo y grave aislamiento de América Latina con respecto a EE.UU. Tampoco es seguro que el pueblo norteamericano siguiera apoyando locuras de ese tipo, después del desgaste y los múltiples fracasos en Afganistán, Irak y Siria.


Pero es bueno saber que un bufón comanda el Imperio, y todo lo que puede ocurrir a partir de esa situación. Incluso una crisis final que pueda acabar con la hegemonía estadounidense en el mundo.

FUENTE: publico.es
A contracorriente
Emir Sader - 14/08/2017

Muchos pensarán que eso de que la hegemonía imperial estadounidense cualquier día pueda petar, es algo imposible. Pues recuerden, si no, los grandes  imperios que en la historia han sido: el persa, el egipcio, el romano, el árabe, el mongol, el británico, el español... y pregúntense ahora ¿dónde coño están?

Y es que todo lo que sube, baja.

Hasta los cipotillos. ¡Verdad, María!

5/6/17

CUANDO LA PAZ ES UN BIEN COMERCIAL

En Riad, Donald Trump no podía mencionar que la mayoría de los secuestradores del 11-S procedían o pertenecían al culto o fe suní, que fue la inspiración del Dáesh, ni qué país cortó cabezas con un entusiasmo parecido al de ISIS. (Respuesta: Arabia Saudí). Y cuando Trump llegó a Israel el lunes se enfrentó a un nuevo protocolo de la censura: no mencionar quién está ocupando las propiedades ajenas en Cisjordania o qué país está escandalosa y continuamente robando tierras -legalmente propiedad de árabes– solo y exclusivamente para judíos. (Respuesta: Israel).

Así que ¡bingo!, en la mayor alianza de Oriente Medio jamás creada en la historia, los saudíes y los otros dictadores árabes suníes, y el Presidente chiflado de Estados Unidos y el cínico primer ministro de Israel, todos estén de acuerdo en la identidad del país diabólico que todos ellos pueden maldecir con una sola voz, inspirador del “terrorismo mundial”, instigador de la inestabilidad de Oriente Medio, la mayor amenaza para la paz mundial: el Irán chií.


Así que a los pocos minutos de aterrizar en el aeropuerto de Tel Aviv -parte de cuyas pistas de aterrizaje en realidad se encuentra desde hace sesenta años en un terreno legalmente propiedad de árabes palestinos- los escribas de los discursos de Trump (porque Trump seguramente no puede escribir esto) fueron reproduciendo una vez más su odio a Irán, el “terror” de Irán, el complot de Irán, el continuo propósito de Irán de fabricar una bomba nuclear. Y todo esto cuando en Irán acaba de ser reelegido un presidente cuerdo que realmente firmó el acuerdo nuclear hace dos años que redujo sustancialmente la amenaza estratégica de Irán a Israel, a los árabes y a Estados Unidos.

“Nunca se debe permitir que Irán llegue a poseer un arma nuclear”, dijo el comandante en jefe de Estados Unidos. Irán “debe cesar su financiamiento mortal [sic], la formación y el equipamiento de los terroristas y las milicias”. Un marciano que también podría haber aterrizado en Tel Aviv al mismo tiempo seguramente concluiría que Irán fue el creador del Dáesh y que Israel ya estaba bombardeando a los crueles y violentos miembros del culto del califato islámico. Y los marcianos -sin duda más inteligente que el presidente de Estados Unidos- se sorprenderían mucho al descubrir que Israel ha estado bombardeando a los iraníes, los sirios y sus milicias, pero que nunca ha bombardeado al Dáesh.


No es de extrañar que Trump tratara de ceñirse a su guión preparado. De lo contrario podría hacer algo cuerdo como felicitar al nuevo presidente de Irán por su victoria electoral y por su promesa de adherirse al acuerdo nuclear; como exigir el fin de la ocupación y colonización israelí de tierras árabes; como decirle a los viejos y cansados ​​dictadores y príncipes del mundo árabe que la única forma en que pueden librarse –ellos y Estados Unidos- del “terror” es mediante el tratamiento de su gente con dignidad y la protección de sus derechos humanos. Pero no, eso es demasiado sensible, justo y moral -y demasiado complicado- para un hombre que hace tiempo se cayó del borde de la realidad y entró en el mundo tuitero. Por lo tanto habló del “acuerdo definitivo” entre Israel y los palestinos, como si la paz fuera una mercancía que se compra o se vende. Como la que acababa de fijarse en Arabia Saudí: pistolas para el petróleo y dólares.

Pero entonces, sentado junto a Netanyahu, el hombre se saltó el guión. Para alivio de todos regresó a los horrores del acuerdo nuclear con Irán, el acuerdo que era “increíble”, “algo terrible” en que los EE.UU. habían entrado. “Les tiramos un salvavidas –a la vez que les dimos la posibilidad de continuar con el terror”-. La amenaza de Irán, dijo a Netanyahu, “ha obligado a la gente [sic] a juntarse de una manera muy positiva”.


Esto era realmente “increíble”. Trump, en su extraña inocencia, cree que el deseo del mundo suní de destruir al Irán chií y sus aliados es la clave para la paz árabe-israelí. Tal vez eso es lo que quería decir -si se refería a algo- cuando dijo que su visita marcó “una oportunidad única para llevar la seguridad y la paz a esta región, a su gente, a la derrota del terrorismo y la futura creación de la armonía y la paz” -un trocito estaba en el guión, por cierto- en lo que llamó “esta antigua y sagrada  tierra”. Se refería a Israel, pero fue la misma frase que utilizó en Arabia Saudí y sin duda podría hacerlo en Suiza, Lesotho o, bien, en Corea del Norte si trajera alguna ventaja. O Irán, para el caso.

Quién sabe si Trump va a ser capaz de hacer frente a la colonización judía, el robo de tierras y al propio pequeño dictador de Palestina cuando encuentre a Mahmoud Abbas el martes. O a los derechos humanos. O a la justicia. Su discurso en el Museo de Israel, entonces, va a ser una maravilla si se aleja del guión. Pero las oportunidades están encerradas en la descripción: la unidad de los árabes suníes en su odio al Irán chií -él misericordiosamente dejará de lado los contextos de "sunní" y "shií" en caso de que así se preste para el juego-, las relaciones más estrechas entre los dictadores del Golfo y sus príncipes con la apropiación de tierras de Israel, la necesidad de los palestinos para poner fin a “terrorismo” contra sus ocupantes -la palabra “ocupantes” también debe dejarse fuera, por supuesto- y eterno, al fin, el amor sagrado de Estados Unidos a Israel para bien o para mal.


FUENTE:  http://www.counterpunch.org
Robert Fisk - Independent
Traducido del inglés para Rebelión por J. M.






Todo esto suena a tambores de guerra.

26/3/16

¡BOMBA VA!

Bélgica anuncia el envío de aviones F-16 a Siria para bombardear al ISIS

Así lo ha confirmado el primer ministro, Charles Miches, tras reunirse con el secretario de Estado de EEUU, John Kerry, que afirma que el Daesh está perdiendo terreno en Irak y Siria. Washington ha anunciado una nueva oleada de ataques en ambas regiones.

El secretario de Estado de EEUU, John Kerry, con el primer ministro belga, Charles Michel, en la reunión que ambos han mantenido este viernes en Bruselas. REUTERS/Andrew Harnik

El primer ministro belga, Charles Michel, confirmó hoy que Bélgica enviará próximamente cazas F-16 para bombardear al Estado Islámico (EI).

En unas declaraciones a los medios de comunicación tras reunirse con el secretario de Estado de EEUU, John Kerry, Michel indicó que el mandato para esta misión ya ha sido discutido con el Parlamento mucho antes de los atentados del aeropuerto y el metro de Bruselas que tuvieron lugar el pasado martes.


Por su parte, Washington anunció que EEUU y sus aliados lanzaron el jueves otra oleada de bombardeos contra el Daesh en Siria e Irak. La fuerza especial combinada conjunta descargó 11 ataques cerca de ocho ciudades iraquíes contra unidades tácticas de los yihadistas y otros dos cerca de las poblaciones sirias de Al Hawn y Mara.

Michel aprovechó la reunión con Kerry para anunciar el envío de tropas, que ya se comenzó a debatir en el Parlamento belga el pasado día 3, antes de los atentados de Bruselas. EEUU se lo había pedido para reforzar la lucha internacional contra el autodenominado Estado Islámico (EI) en Siria.

Parlamento belga

"Estamos plenamente convencidos de que los desafíos que enfrentamos todos juntos, los desafíos de seguridad, también suponen defender nuestros valores comunes que compartimos Europa y EEUU", señaló hoy el primer ministro belga. "Somos grandes democracias. Compartimos convicciones, la libertad de expresión, la tolerancia, la diversidad y la apertura de nuestras sociedades, valores que debemos defender con toda nuestra determinación", recalcó.

Michel prometió que Bélgica y los demás países afectados por el terrorismo "restaurarán sus valores" pese a los intentos de los terroristas de derrotarlos, y que el país debe "estar a la altura" de la alianza con Estados Unidos.

Los líderes del Daesh, "diezmados", según Kerry


Por su parte, Kerry aseguró que el Daesh ataca en Europa porque está perdiendo terreno, líderes, soldados y capacidad de financiación en Irak y Siria. "La verdadera razón por la que el EI está recurriendo a acciones fuera de Oriente Medio es porque su fantasía de un califato se está derrumbando ante sus ojos, su territorio se está reduciendo día a día, sus líderes están siendo diezmados, sus fuentes de financiación están desapareciendo y sus soldados están huyendo", afirmó.

Kerry: "La razón por la que el EI está recurriendo a acciones fuera de Oriente Medio es porque su fantasía de un califato se está derrumbando ante sus ojos"

El secretario de Estado de EEUU subrayó que ningún gobierno del mundo apoya al EI y apuntó que entre las víctimas mortales del último atentado yihadista había ciudadanos estadounidenses.


Kerry indicó que, además de la solidaridad y el apoyo del pueblo estadounidense, el Gobierno belga puede contar con "toda la asistencia necesaria" de Washington para "investigar" y "llevar ante la justicia a los responsables de estos "hechos despreciables" y esta "tragedia" que ha provocado "pérdidas irremplazables".

Asimismo, resaltó que la tarea de acabar con el EI es un proyecto a largo plazo que requiere de gran esfuerzo y cooperación intergubernamental, pero se mostró convencido de que al final la coalición contra los yihadistas prevalecerá. "Tendremos éxito destruyendo al EI y recuperando una sensación de tranquilidad y paz en las sociedades que persiguen exactamente eso en su vida diaria", afirmó. Pese al golpe que han supuesto ataques como los de París, Bruselas, Ankara, Túnez o San Bernardino, agregó el secretario de Estado, la coalición internacional no se dejará "intimidar" y volverá con "mayor resolución y fuerza" para eliminar las "creencias nihilistas y cobardes" del EI.


FUENTE: publico.es
Agencia EFE - Bruselas
25/03/2016
Primero en Francia, después en Bélgica… ¿habrá un atentado similar en España que nos empuje a unirnos también a ese club del bombardeo?

Yo me pregunto si tirar tantas bombas sirve para algo, aparte de contribuir al gran negocio armamentístico, porque llevan años pegando pepinazos y "nasti de plasti". Solo generan odio, hambre, miseria, destrucción indiscriminada, y lo que peor, la muerte de miles de inocentes.




NO SOLO SE INMOLAN LOS TERRORISTAS

 
Lamentablemente, se ha vuelto a repetir la tragedia y Europa quedó conmocionada por un nuevo atentado. Sin embargo, nada hemos hecho por evitarlo y, peor aún, estamos expulsando y dejando morir a los más de dos millones de refugiados que huyen del mismo terror que nos golpea. Inhumano.

El origen

Mapa de Oriente Medio

Todo comenzó con dos guerras colonialistas: Irak y Afganistán. Dos conflictos que convirtieron dos países en estados fallidos, ese gran negocio del neocolonialismo. Entramos en Irak para encontrar las armas de destrucción masiva, democratizar el país y terminar con el supuesto apoyo que se prestaba a Al Qaeda. Mentira. Nuestros propios servicios de inteligencia negaron tanto los apoyos como la existencia de armas de destrucción masiva. Aznar no fue engañado, Aznar nos engaño: todo fue una guerra colonial.

No conseguimos ninguno de los objetivos: no encontramos las armas de destrucción masiva, no democratizamos el país y no solo no conseguimos que Irak dejase de ser un estado que apoyase al terrorismo, sino que lo convertimos en un estado terrorista en el norte. Imposible hacerlo peor.
Entramos en Afganistán para matar a Osama Bin Laden, democratizar el país y terminar con un estado terrorista.

Usāma bin Muhammad bin `Awad bin Lādin  
(Osama Bin Laden)

A Osama Bin Laden lo matamos (supuestamente) en Pakistán. Esos pequeños fallos; ya se sabe.

Eliminamos toda estructura de gobierno y creamos un estado nuevo apoyado en los Señores de la Guerra, algo así como terminar con toda organización en Nápoles y construir un nuevo estado apoyándose en los capos de la mafia. Por ello, los niveles de corrupción, inseguridad y falta de legitimidad son elevadísimos. No es nuevo, Ronald Reagan ya recibió a los luchadores de la libertad afganos, que era como se llamaba entonces a los terroristas que combatían a los soviéticos. ¡Hasta Rambo estaba con ellos!

Ronald Wilson Reagan
 (cuadragésimo presidente de EE.UU.)


No solo no conseguimos terminar con el terrorismo, que por cierto había alimentado Occidente, sino que terminamos con uno de los pocos éxitos de los talibanes, marginalizar el cultivo de opio. En pocos años, con tropas internacionales ocupando todo el país, Afganistán recuperó los niveles de producción y exportación de opio anteriores a la guerra (con aumentos del 1.400% anual) y se comenzaron a registrar niveles de récord año tras año (6.400 toneladas de opio en 2014 frente a las menos de 70 toneladas en 2001). Para hacernos una idea, en el año 2000 había 82.000 hectáreas cultivadas y los talibanes las redujeron en un 91% hasta las 7.000 en 2001, pero en 2002 con la tropas internacionales ocupando el país ya había entre 45.000 y 65.000 hectáreas). 

Por tanto, fracasamos de forma estrepitosa en todos los objetivos marcados.

EI, ISIS o DAESH

El EI, ISIS o DAESH surge debido a las nuevas guerras colonialistas que generan estados fallidos, cuyo negocio es innegable, y motivado también por la gran partida de ajedrez que juegan los poderosos usando el planeta como tablero (Ucrania, Yemen, Siria, Magreb, etc.). Todo ello con más de dos millones de muertos, dos millones de refugiados, veinte millones de desplazados en Oriente Próximo y más de cincuenta en todo el mundo y casi veinte billones de euros gastados de forma directa o indirecta en la guerra.

Juzgar a los culpables

Tony Blair (Gran Bretaña), George Bush (EE.UU.) y José Mª Aznar (España)
El Trío de las Azores

Lo primero que tendríamos que admitir es que somos responsables en un altísimo porcentaje de los muertos en Bélgica, Francia, Reino Unido, España, Estados Unidos y en esos otros países en los que nos importa un pimiento que mueran personas en atentados.

Deberíamos haber juzgado a Aznar, Bush, Blair y otra serie de gobernantes por crímenes de guerra, sin olvidarnos del inventor de la alianza de las civilizaciones, Zapatero (que con Bono y Chacón multiplicaron por seis la fabricación y venta de armas).

Terminar con el gran negocio de los estados fallidos y no participar de la partida de ajedrez

Soldados protegiendo un campo de adormideras en Afganistán

Nuestras industrias farmacéuticas y nuestros traficantes, los cuales invitan a sus yates a nuestros políticos, se aprovechan del opio de Afganistán. Por desgracia, hay más puntos de unión (los paraísos fiscales, la financiación, el blanqueo de dinero y los delitos) entre nuestros partidos políticos y los narcotraficantes que los que puedan tener con los ciudadanos.

Nuestras industrias armamentísticas se aprovechan de las guerras y reparten beneficios con los bancos, las empresas y los señores de la guerra españoles (Morenés, Chacón, Bono, los altos mandos militares que trabajan en la industria armamentística, etc.).

Nuestras petroleras han estado expoliando el petróleo en condiciones de enormes beneficios en el Irak controlado por Occidente y en mejores condiciones todavía en la parte ocupada por el EI. Ése es el gran negocio.

Nuestras empresas textiles (El Corte Inglés, Inditex o Cortefiel), las mismas que esclavizan a trabajadores en India o Bangladesh, estarán frotándose las manos ante el gran negocio que no tardará en llegar: mano de obra barata muy fácil de esclavizar. Alguna, como El Corte Inglés, tiene más intereses aún.
El Estado Islámico y las mentiras de los medios de comunicación y de los gobernantes


El EI se asienta en un territorio situado entre el norte de Irak y el este de Siria con una población aproximada de entre 6 y 8 millones de personas. Se financian principalmente de la venta de petróleo y antigüedades (a Occidente), las donaciones que reciben de las monarquías del Golfo (esas que son tan amigas de nuestros reyes), extorsiones, secuestros o divisas de los bancos que se encuentran en sus territorios.

Se trata de unos 50.000 a 60.000 mercenarios que se encuentran en una zona llana, desértica e interior. Es llana, por lo que no pueden esconderse como en las montañas de Afganistán. Es desértica por lo que tienen que localizarse en áreas muy concretas (y conocidas) en las cuales hay agua y sus movimientos militares son muy complejos. Finalmente, es interior, por lo que no tienen salida al mar y su única posibilidad son las comunicaciones por carretera, que cuando hablamos de exportación de petróleo son bastantes reducidas (obviamente, los camiones de petróleo no llevan bien el desplazarse por los desiertos).


Así pues, es una gran mentira de los medios de comunicación y los países occidentales que el EI lleve varios años soportando, sin armamento pesado ni aviación, los ataques de Estados Unidos, Francia, Reino Unido, Rusia, Israel, Turquía, el resto de aliados o las monarquías del golfo. Es decir, 60.000 mercenarios han sobrevivido a ejércitos con más de 4 millones de soldados, aviación y armamento pesado, y lo han hecho en una zona llana, desértica e interior que militarmente sería la más accesible e indefendible del mundo. No solo eso, encima tenemos que soportar que los medios de comunicación pretendan hacernos creer que el EI quiere recuperar Al Andalus.

No es la única mentira, también nos informan que lo que sucede es una guerra cultural entre Occidente y el Islam cuando la realidad es que casi el 90% de los atentados y las víctimas del EI no se encuentran en Occidente y de los veinte centros religiosos atacados hay una sinagoga, una iglesia y dieciocho mezquitas.

Primero: Terminar con el Estado Islámico


El primer reto que tenemos es terminar con el Estado Islámico. La gran dificultad de esta operación es que terminar con este estado terrorista significaría enormes pérdidas para la industria armamentística, las petroleras, distintas empresas, los bancos y los gobernantes, que obtienen enormes réditos con su existencia y un cheque en blanco para recortarnos libertades.

Terminar con el EI es relativamente sencillo, aunque tendríamos que asumir un coste elevado de víctimas. Una primera operación de bloqueo económico de seis meses a un año de duración que debilite considerablemente su estructura financiera y le impida pagar a los mercenarios reduciría el número de estos y el apoyo entre la población. Una segunda fase militar, si fuera necesaria, terminaría con los terroristas con una operación terrestre que no excedería los seis meses.

Segundo: Plan de desarrollo regional


Una operación militar, de no poder evitarse, debe ser siempre una parte muy pequeña de un plan mucho mayor. El objetivo principal, en este caso, debe ser implementar un plan de desarrollo regional que supondría mucho dinero y esfuerzo (menos que el coste de la guerra, seguro), pero que estabilizaría y desarrollaría la región a medio plazo. Este plan de desarrollo, junto con un plan de integración en determinadas áreas de Europa que ofrezca un verdadero futuro a las comunidades marginadas, es la única forma de reducir los ataques terroristas a corto y medio plazo y terminar con ellos a largo plazo.

¿Por qué nadie habla de un plan de desarrollo regional?

Nadie habla de este plan porque se prefiere gastar billones de euros en la industria armamentística (España ya es la séptima potencia del mundo en fabricación y exportación de armas) que en un plan de desarrollo que generaría estados soberanos que reclamarían la explotación de sus recursos, como el petróleo, que se convertirían en competidores potenciales de nuestras industrias (textiles, por ejemplo) y que dejarían de dar réditos electorales a nuestros gobernantes o servir de cortinas de humo con las que esconder sus políticas.

 

Nadie habla de este plan de desarrollo y, de la misma forma, no recuerdan que el juez Silva denunció que tenía correos electrónicos que vinculaban a Aznar, Agag, Blesa y el tráfico de armas; no recuerdan que Agag declaró en el parlamento portugués debido a sus relaciones con El-Assir y la venta de armas; y no recuerdan que El-Assir es un gran amigo de los Aznar y del rey Juan Carlos con el que se va de monterías (por todo esto, la novela Código rojo ha sido silenciada, dado que trata el tráfico de armas y los distintos intereses de los poderosos).
Y nadie habla de este plan porque el control de los medios de comunicación es absoluto por parte de los distintos poderes.
No nos dejemos engañar


Así pues, cuando pensemos que el ideólogo del EI o de todos estos grupos terroristas se encuentra en una parte indefinida del Islam y que esto es una guerra cultural, sería bueno que supiéramos que, por desgracia, todo esto es un gran negocio, que los responsables están tan cerca de nosotros que les votamos y les hacemos reverencias y que cada atentado de la supuesta guerra cultural supone una subida de las acciones de la industria armamentística en la bolsa.

FUENTE: publico.es
Un paso al frente
Luis Gonzalo Segura
23/03/2016

17/6/15

24 COSAS QUE NO QUIEREN QUE SEPAS (VÍDEO)




ISIS (iniciales en inglés para Islamic State of Iraq and Syria: Estado Islámico de Irak y Siria), antiguo nombre de la organización terrorista Estado Islámico.

AL QAEDA (en árabe: القاعدة ʔal-Qāʔidah: ‘la base’) o Al Qaida es una organización paramilitar, yihadista que emplea prácticas terroristas y se plantea como un movimiento de resistencia islámica alrededor del mundo.  

16/12/14

LA TERCERA GUERRA MUNDIAL

Todo indica que está en preparación la tercera guerra mundial. Es una guerra provocada unilateralmente por los EEUU con la complicidad activa de la UE. Su objetivo principal es Rusia e indirectamente China. El pretexto es Ucrania. En un raro momento de consenso entre los dos partidos, el Congreso de los EEUU aprobó el pasado día 4 la Resolución 758, que autoriza al Presidente a adoptar medidas más agresivas de sanción y de aislamiento contra Rusia, a proveer de armas y otras ayudas al gobierno de Ucrania y a fortalecer la presencia militar de los EEUU en los países vecinos de Rusia. La escala de provocación a Rusia tiene varios componentes que, en conjunto, constituyen la segunda guerra fría. En ésta, al contrario que en la primera, se asume ahora la posibilidad de guerra total y, por tanto, de guerra nuclear. Varias agencias de seguridad hacen ya planes para el Day After de un enfrentamiento nuclear.


Los componentes de la provocación occidental son tres: sanciones para debilitar a Rusia, instalación de un gobierno satélite en Kiev y guerra de propaganda. Las sanciones son conocidas, siendo la más insidiosa la reducción del precio del petróleo, que afecta de modo decisivo a las exportaciones de petróleo de Rusia, una de las más importantes fuentes de financiación del país. Esta reducción conlleva el beneficio adicional de crear serias dificultades a otros países considerados hostiles (Venezuela e Irán). La reducción es posible gracias al pacto sellado entre EEUU y Arabia Saudita, por el cual EEUU protege a la familia real (odiada en la región) a cambio de mantener la economía de los petrodólares (transacciones mundiales de petróleo denominadas en dólares), sin los cuales el dólar colapsaría como reserva internacional, y con ello, la economía de los EEUU, el país con la mayor y más impagable deuda del mundo.


El segundo componente es el control total del gobierno de Ucrania, de manera que el país se transforme en un estado satélite. El respetado periodista Robert Parry  (que denunció el escándalo de Irán-Contra) informa de que la nueva ministra de Economía de Ucrania, Natalie Jaresko, es una ex-funcionaria del Departamento de Estado, ciudadana de los Estados Unidos, que obtuvo la ciudadanía ucraniana días antes de asumir el cargo. Ella era hasta ahora presidente de varias empresas financiadas por el Gobierno norteamericano, creadas para actuar en Ucrania. Ahora se comprende mejor la expresión, en febrero pasado, de la Secretaria de Estado norteamericana para los asuntos europeos, Victoria Nulland: “Fuck the EE.UU”. Lo que ella quiso decir fue “¡Rayos! Ucrania es nuestra. Pagamos para eso”.


El tercer componente es la guerra de propaganda. Los grandes medios y sus periodistas están siendo presionados para difundir todo lo que legitima la provocación occidental y ocultar todo lo que la cuestiona. Los mismos periodistas que, tras los briefings de las embajadas de los EEUU y de Washington, colmaran las páginas de sus periódicos con la mentira de las armas de destrucción masiva de Saddam Hussein, están ahora repitiendo la mentira de la agresión de Rusia a Ucrania. 


Pido a los lectores que imaginen el escándalo mediático que ocurriría si se supiese que el Presidente de Siria acaba de nombrar a un ministro iraní a quien días antes le concedió la nacionalidad siria. O que comparen el modo en que fueron publicadas y analizadas las protestas en Kiev en febrero pasado y las protestas de Hong Kong de las últimas semanas. O que evalúen también la relevancia dada a la declaración de Henry Kissinger de que es una temeridad estar provocando a Rusia. Otro gran periodista, John Pilger, decía recientemente que si los periodistas hubiesen resistido a la guerra de propaganda, tal vez se hubiese evitado la guerra de Iraq en la que han muerto hasta el fin de la semana pasada 1.455.590 iraquís y 4801 soldados norteamericanos. ¿Cuántos ucranianos morirán en la guerra que se está preparando? ¿Y cuántos no ucranianos?


¿Estamos en democracia cuando el 67% de los norteamericanos están en contra de la entrega de armas a Ucrania y el 98% de sus representantes votan a favor? ¿Estamos en democracia en Europa cuando una discrepancia semejante o mayor separa a los ciudadanos de sus gobiernos y de la Comisión de la UE? ¿O cuando el Parlamento Europeo sigue en sus rutinas, mientras Europa está siendo preparada para ser el próximo teatro de guerra, y Ucrania, la próxima Libia?

FUENTE: publico.es

Boaventura de Sousa Santos
Traducción, Daniel Rodriguez Seco

13 dic 2014


¡No hemos aprendido un "corno"!

Miles de años de "civilización" y seguimos repitiendo la misma guerra del principio.