LOS "TRUMPEROS"

Famosos españoles que celebran (y mucho) el triunfo de Trump

Donald Trump

Ocurrió. Aunque algunos ni en el peor de los sueños esperaban que fuera real. y para ser testigos de ello las cadenas españolas, tanto de radio como de televisión, enviaron a varios de sus rostros estrella a cubrir las elecciones presidenciales de Estados Unidos.

Todo hacía prever que sería Hillary Clinton la ganadora; que la que fuera primera dama sería la primera mujer en alcanzar el puesto político más relevante del planeta.

Pero no, la demoscopia, los medios y los opinadores estaban equivocados. No supieron detectar el sentir de buena parte del electorado norteamericano que acabó dando las llaves de La Casa Blanca a Donald Trump.

La Casa Blanca (Washington - EE.UU.)

Las acusaciones de racista, misógino, de peligro andante, de caos inminente no sirvieron para desmovilizar a una masa de votantes, cautivados por el discurso de vendedor de feria que el magnate ha ido moldeando con sus años de experiencia televisiva. 

Pero no sólo a ciduadanos de los 50 Estados norteamericanos ha logrado atraer, sino que su verbo y sus propuestas también le han parecido seductoras a españoles que no le han podido votar, pero que lo hubieran hecho encantados. 

Rostros de la política, la televisión y el periodismo patrio que se hubiera entregado con pasión a los brazos de Trump en caso de haber nacido en Indiana. Se han tenido que conformar con brindar con su victoria y con la derrota Demócrata.

Se suben al carro del ganador:

Paco Marhuenda

Lo suyo con Trump no es amor a primera vista. Él es fiel a un solo líder y sólo tiene ojos para Mariano, pero ver cómo la prensa española atacaba con virulencia el discurso del ganador le hizo sacar su vena más republicana. Republicana a la americana, entiéndase. Hacer un repaso por su timeline en Twitter, tras el tirunfo de Trump es sinónimo de contemplar el proceso de edulcoramiento constante de alguien al que  las cancillerías europeas siguen sin ver con pasión. Les faltan dos tardes con Marhuenda que diría Jordi Sevilla.

Sánchez Dragó

Lo suyo es ir contracorriente o eso dice él. Así que en su blog de El Mundo no tuvo duda alguna en celebrar, alegrarse y casi que brindar por el triunfo del candidato republicano. No es de extrañar, por otra parte. Se felicitaba porque "terminó el buenismo, el multiculturalismo, el internacionalismo, la globalización económica, la corrección política, la demagogia izquierdista,

Hermann Tersch

El columnista de ABC debe ser de los que antes de las elecciones ya apoyaba a Trump. Ansiaba con todas sus fuerzas que Hillary Clinton cayera derrotada. No soportaba al candidata demócrata, ni nada de lo que representa. Así que cuando en la jornada electoral comenzó a vislumbrarse que Estados clave caían del lado republicano le faltó brindar con champagne.

Juan Manuel de Prada

Dijo en tono de broma en Late Motiv que se haría un trío con Donald Trump y Vladimir Putin. Algo que no pasará, para desolación de algunos. Pero el escritor y periodista sí que vio aspectos positivos en el próximo presidente de los Estados Unidos.  De Prada no es que estuviera entregado a Trump, pero al comprobar que muchas voces se alzaban en contra él viró su opinión: "basta que un personaje sea vituperado por los archipámpanos del mundialismo, o por sus corifeos y mamporreros, para que lo mire con cierta benevolencia e interés.

Roberto Centeno

Lo suyo sí que ha sido el ejemplo máximo de ir sacando pecho por los programas de actualidad política. A veces, al escucharle, pareciera que Donald Trump le debe gran parte de la presidencia a él. A su estrategia. Hay que decir que el equipo del republicano le consultó para atraer al voto latino. Centeno, que ve a alguien de Podemos y (casi) que se santigua, lleva unos días exultantes.

Jiménez Losantos

Él más que festejar la vitoria de Trump festeja ver perder a los que le parecen un peligro para España, el liberalismo y hasta para la esencia del baturrismo. El periodista de Es Radio no necesita muchos motivos para odiar (hatear, que se dice en Twitter) a Clinton y a quien se pase por delante. Pronto, Trump le parecerá un estadista.

Isabel Rábago

En realidad la periodista experta en 'corazoneo' no fue nunca muy pro Trump antes de la batalla electoral. Le sucedía como a mucho de los cargos del PP, que iban con Clinton pero decían que como mal menor. Pero fue saberse los resultados y la imagen de Trump les pareció que encarnba la esencia de Franklin, Washington y demás prohombres americanos.

Ella, que ama la derrota de Podemos sobre todas las cosas, no desdeña una buena victoria de Trump.

FUENTE: zeleb.es
20/11/2016

¡"Ños"!... 

Lo más granado del facherío nacional.