4/9/15

LA "DESRABIETA" Y LOS PROFESIONALES DE LA FONTANERÍA

 Llave de paso vieja

Tras la rabieta de ayer, al no poder solucionar el problema de la pérdida de agua, hoy, para cambiar, ha llegado la "desrabieta". Lo ha hecho de la mano de dos operarios de EMMASA, coherentes, amables y verdaderos profesionales que, cuando acudieron a la cita concertada con aquel vecino que tuvo más picardía que yo para gestionar el asunto, al ver que existía otra fuga (la que atañía a mi vivienda), se apresuraron a comunicarlo ellos mismos a la empresa, efectuando el cierre correspondiente. Así que me apresuré a llamar al seguro, para que enviaran a alguien a solventar la avería.

Nueva llave de paso

Cuando relaté a los operarios de EMMASA mi odisea telefónica del día anterior, no sólo fueron caballerosos, hablando de un posible malentendido entre su compañera y yo, sino que incluso  hicieron gala de su profesionalidad echándole un capote al fontanero del seguro que, tras cambiar la llave de paso, sudando la gota gorda, intentaba en vano reinstalar el contador que parecía haber crecido de repente. Le explicaron la forma idónea de encajarlo: utilizar una llave de tubo para mover, con sumo cuidado, uno de los codos de la tubería galvanizada, para generar así la necesaria holgura, que había disminuido con la nueva llave de paso.

Llave de tubo

Una vez finalizado el trabajo, abrieron de nuevo la arqueta que, tras largos años de cerrazón y herrumbre, seguía resistiéndose a los golpes, y con un leve giro de su "llave mágica" volvieron a restablecer el suministro de agua, que habría de dar a luz, de nuevo, en todos los grifos de la casa.


Estos operarios, cuyos nombres desconozco, tuvieron incluso la amabilidad de eximirme de la llamada a EMMASA para comunicar que el asunto ya estaba zanjado, indicándome que ellos mismos se encargarían de cerrar la incidencia.

Por todo ello, quiero agradecer públicamente su labor y su profesionalidad. Y si, por una de esas casualidades del destino, llegan a leer estas líneas, invitarlos al menos a un café, ya que, con el tibilorio que se montó, ni siquiera reparé en el detalle.

Ciudadano Plof

No hay comentarios:

Publicar un comentario