14/11/17

NO MALEABLE


Tomando el cafelito matutino en el bar de costumbre, surgen circunstanciales diálogos que derivan hacia lo social, lo económico, lo deportivo, lo político y hasta lo religioso, y que, a veces, terminan como el rosario de la aurora; como hoy qué, contemplando por la televisión las imágenes del terremoto acaecido en la frontera irano-iraquí, di en razonar que, a dios (en todas sus versiones) los humanos le importamos un carajo. Ante lo cual, uno de los parroquianos, dijo:

- ¡Usted es un hereje!

- ¡Y a mucha honra! -contesté - El problema estriba en que, desde pequeños, la Iglesia nos convenció de que esa palabra identificaba a lo más reprobable del género humano, formando parte de una larga colección entre las que incluye, blasfemo, injurioso, apóstata... todo aquello "malo y negativo" que pueda cuestionar lo establecido. Pero ¿sabe usted cuál es el verdadero significado de la palabra herejía?



- ¿Cuál? - respondió. 

- Pues ni más ni menos que la controversia o rechazo de determinados dogmas y postulados. De donde podemos inferir que, el hereje, es aquel individuo  que no se deja convencer ciegamente y que, afianzado en la lógica y en la razón, busca la verdad por si mismo... contra viento y marea.

Tengan por seguro que si los ciudadanos no fuéramos tan maleables, tan dóciles y tan sumisos...


Citizen Plof
 

2 comentarios:

  1. ¡Sí!... ¡El gallo del hereje!

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  2. ¡Je, je, je...! Esto me recordó cuando, en 2002, se prohibió la canción "Aserejé" en determinados colegios religiosos hondureños porque, según sus responsables, incitaba a la herejía: "a ser hereje"... ¡Hay que joderse!

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