31/8/17

LA PESADILLA

Normalmente duermo boca abajo, y por ello no conseguí ver a la criatura que se hallaba sentada sobre mi espalda. De lo que puedo dar fe es de su enorme peso, pues me impedía moverme y casi respirar. Quise alargar una mano y tocar a mi mujer, que dormía a mi lado, para pedirle ayuda, pero no tenía control alguno sobre mi cuerpo. Entonces intenté gritar y por lo visto lo conseguí porque ella despertó sobresaltada, encendió la luz y me preguntó qué me pasaba.

- Que tenía una pesanta*, como de plomo, sentada sobre mí.
 
The nightmare (la pesadilla) - Henry Füsli - 1871
 
Algo que todavía me desconcierta es que, si se trataba de un ser proveniente de un plano no físico, ¿cómo pude sentir aquel tremendo peso?

(*) En la cultura popular catalana, la Pesanta es un animal mitológico con forma de perro enorme (raramente de gato), que se mete por la noches en las casas y se coloca sobre la gente, dificultando la respiración y provocando angustia y pesadillas.
WIKIPEDIA - La enciclopedia libre.


Publicado en el blog "Amontonador urgente de palabras":


Miguel Ángel G. Yanes

UN PAÍS JODIDO

Rajoy ha salido airoso, y si no se ha asomado al balcón de Génova a celebrar el escaqueo, ha sido por el qué dirán. Quizá ese sea el gran problema de España. Tener gobernantes que consideran un éxito que un presidente se escaquee.


Eran las diez de la mañana y en la Audiencia Nacional se sentaban, en forma de Rajoy, décadas de corrupción del partido gobernante. Décadas de un modo de gestionar lo público que han provocado una hemorragia económica y social que sigue desangrándonos. Como todos sabíamos, y como diría el propio Rajoy, lo de hoy no era una cosa menor, o dicho de otra forma, era cosa mayor. Ese era el contexto, la Audiencia Nacional, el terreno de juego y Rajoy, el protagonista que saltó al campo algo inquieto. Se notó en sus primeras respuestas, breves y desenfocadas –“no me ha respondido a lo que le pregunto” fue su debut en la sala-- que aquello no era un trago agradable. Al poco todo cambió. Cualquier futbolista explicaría de forma sencilla el proceso por el cual se pasa de los nervios al confort en una gran cita como la de esta mañana en cuestión de segundos. “Sí, bueno, algunos nervios, pero cuando uno sale al campo y la pelota rueda, uno hace lo que sabe hacer y los nervios se van, ¿no?”. Y el pelotero Rajoy mató los nervios haciendo lo que sabe hacer: jugar al esperpento con ayuda arbitral y echándole berlanguismo al asunto.


Uno de los principales problemas a los que tenía que enfrentarse Rajoy, además de a la foto de un presidente del Gobierno sentado ante un tribunal, era el de la obligación de tener que decir la verdad, un ejercicio imposible para quien nada con la corrupción al cuello. Descartada la posibilidad de decir la verdad sobre lo que sabe de la Gürtel, a Rajoy le quedaba la única salida de no mentir demasiado. Y esta mañana sólo necesitó la mentira primera: “Mi función en el partido era sólo política”. A partir de ese momento, de la tarea de evitar la escena de un presidente riéndose del tribunal, se encargó el abogado de Bárcenas, que se puso la camiseta de marianista, y el propio presidente de la sala. Sus “venga, venga, ya está bien, le ha dicho que no sabe, siguiente pregunta” superaron en número, para sorpresa en las casas de apuestas, a los “mire usted, no me acuerdo” del presidente.  

 

La cara del presidente de la sala era de apuro. En cada gesto parecía pedir que aquello acabase lo antes posible, que estamos molestando a este señor de Pontevedra y tendrá cosas que hacer esta mañana. En su salsa y cediéndole el nerviosismo al propio tribunal, Rajoy empezó a hacer de Rajoy en plena sede judicial recordándonos a Maradona dándole toques a aquella bola de papel. Los peloteros son capaces de hacer virguerías incluso en las condiciones más adversas y el presidente del Gobierno, preguntado por la mayor trama corrupta de nuestra historia, desplegó su repertorio de chascarrillos –“mi respuesta tiene que ser gallega, no va a ser riojana”--, faltas de respeto a los letrados –“no es muy brillante su razonamiento”-- y el vacile habitual –“hacemos lo que podemos significa que hacemos lo que podemos”-- a los que nos tiene acostumbrados. En la sala hubo risas. El marianismo como forma de vida es hegemónico.


Acabado el paripé que ha llevado a un hombre que no tenía ni idea de lo que allí se trataba a declarar ante el tribunal, el presidente de la sala dio por concluido el mal rato. A esas alturas de la mañana, el cuerpo nos pedía que lo anunciase con un solemne “esto está ya sustanciao”. Un país está jodido cuando la realidad supera la ficción que dibujó gente como Valle-Inclán o Berlanga. Y España está en ese punto de superación. Desde el Partido Popular se muestran eufóricos. Rajoy ha salido airoso y si no ha ido al balcón de Génova a celebrar el escaqueo ha sido por el qué dirán. Y quizá ese sea, hoy día, el gran problema de este país. Tener gobernantes que consideran un éxito que una figura de autoridad como lo es un presidente se escaquee “saliendo airoso”. Considerar una victoria el esconderse tras el yo no sé nada, el evitar responsabilidades dejando caer la culpa de muchos mandamases a un solo extesorero con demencia senil. Será un éxito para algunos. Para la mayoría, esto es un problema que hace que esa gran nación de la que tanto habla Rajoy sea en realidad un país jodido por dirigentes con esos valores.


FUENTE: ctxt.es
TECETIPO
Gerardo Tecé
27/08/2017


Sé que no es lo mismo fervor mariano que marianismo, pero, miren por dónde, observando esta obra pictórica le he encontrado cierta similitud: 

La Virgen puede ser el Estado, Rajoy el Niño, y los dulces Ángeles que lo adormecen, 
esos Señores que, callando, otorgan.

¡ARREPENTÍOS!


Citizen Plof

AGAZAPADOS, PERO SIGUEN AHÍ

El 'Rambo del Bierzo', el neonazi que se libra de la cárcel merced al el cura del pueblo

Miguel Antonio Reguera González cumplirá finalmente su pena en Cáritas de Cacabelos, a las órdenes del párroco que movilizó a sus parroquianos y dedicó dos misas para pedir que el vecino neonazi no entrara en prisión. Y así fue.

Miguel Antonio Reguera González, el Rambo del Vierzo, en su cuarto, rodeado de simbología nazi y armas y munición colgadas de las paredes. / LEONOTICIAS.COM
Miguel Antonio Reguera González, el Rambo del Bierzo, en su cuarto, 
rodeado de simbología nazi, armas y munición. / LEONOTICIAS.COM

Miguel Antonio Reguera González, más conocido como El Rambo del Bierzo, es desde hoy un hombre libre, tras ser condenado a cuatro años de prisión y no cumplir ni un sólo día de privación de libertad, por tenencia ilícita de armas, de munición de guerra y material y aparatos explosivos.

El neonazi residente en la pedanía de Quilós, en la localidad leonesa de Cacabelos, que en el año 2010 fue denunciado ante la Guardia Civil por la Plataforma Antifascista del Bierzo, tras identificarlo en varios vídeos colgados en redes sociales disparando armas de todo tipo en espacios públicos, no ha cumplido ni un sólo día de prisión por la condena impuesta por la Audiencia Provincial de León en 2015.

El Rambo del Bierzo no sólo hacía ostentación de sus armas, sino también de simbología nazi y había convertido su casa y su propio cuerpo en lugares de culto al nazismo y a su máximo exponente Adolf Hitler, donde no faltaban vídeos y música nazi que Reguero ponía a todo volumen y podía ser escuchada en todo el vecindario.

Adolf Hitler

La vivienda registrada por la Guardia Civil estaba empapelada con cartelería, banderas e insignias nacionalsocialistas, junto a soportes en la pared donde exponía su arsenal emulando a los supremacistas blancos norteamericanos fortalecidos con la llegada de Donald Trump

Quienes le conocen aseguran que Reguero es un hombre agresivo y desafiante y que siempre va rodeado de una camarilla ideológicamente afín.

Dilación judicial

Juzgados de Ponferrada (León)

Lo que resulta sorprendente es que, tras ser detenido en abril de 2010, registrada su casa, incautado su arsenal y demás elementos incriminatorios, Reguera fue puesto a disposición judicial, pero el caso se quedó durmiendo el sueño de los justos durante cuatro años en los juzgados de Ponferrada. Mientras tanto, el neonazi imputado regresó a su vida normal en el pueblo, sin que le fueran impuestas medidas cautelares de las que se tenga conocimiento.

No sería hasta el año 2014 cuando el Juzgado de Instrucción número 1 de Ponferrada, partido judicial al que pertenece Cacabelos, en Procedimiento Ordinario, finaliza el sumario 1/2014 con una petición de 11 años de prisión por parte de la Fiscalía en abril de 2015, por los delitos de depósito de munición de guerra, otro de tenencia ilícita de armas y un tercero de tenencia de sustancias y aparatos explosivos.  

El trámite continuó dando traslado de la causa a la Audiencia Provincial de León para la celebración de la vista, que no tendría lugar hasta el 23 de noviembre de ese mismo año. Es decir, desde su detención hasta la celebración de la vista transcurrieron 5 años y 9 meses.

Audiencia Provincial de León

Tras la detención de Antonio Reguera los sectores más ultraconservadores de Cacabelos se manifestaron por su libertad y realizaron una recogida de firmas en su apoyo. 

El máximo paladín del neonazi fue Jesús Álvarez, el sacerdote de Cacabelos, de la Parroquia de la Asunción, quien fechas antes del juicio movilizó a sus feligreses con alegatos en su defensa en las misas del domingo.

El párroco acostumbra, desde el púlpito, a atacar sistemáticamente al gobierno municipal de izquierda que gobierna el municipio, tanto por su gestión como por sus principios ideológicos. Además, el polémico párroco, amigo del exalcalde del PP, es el delegado de la cadena COPE en Ponferrada y hombre con muchos contactos en las altas instancias del poder regional conservador a todos los niveles.

Parroquia de la Asunción (Cacabelos - León)

Trabajos para la Comunidad 300 jornadas

Tras la sentencia condenatoria, el mismo tribunal dictó cinco meses después, en marzo de 2016 una ejecutoria por la que defendió la suspensión de la condena, ya que, "los hechos enjuiciados datan de hace más de seis años, al punto de haberse estimado en la sentencia la concurrencia de la circunstancia atenuante muy cualificada de dilaciones indebidas, que el penado merece la consideración de delincuente primario, que la sentencia dictada no impone obligación de reparar daños o perjuicios, que no se conoce que el penado tenga otros procedimientos abiertos y que colaboró eficazmente al esclarecimiento de los hechos”. 

En resumen, la sentencia quedó en suspenso durante tres años y siendo sustituida por una pena de diez meses de Trabajos en Beneficio de la Comunidad, a condición de volver a delinquir.

 Cacabelos

El Ayuntamiento de Cacabelos esperaba hacerse cargo de la gestión de estos trabajos sociales como hace habitualmente con otros condenados. Algunos medios, incluso, apuntaron la posibilidad de que las cuatro horas diarias que debía dedicar fuera para barrer las calles. Pero todos estaban equivocados.

Al parecer, la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias ya había preparado su solución. Así, en un escrito de fecha 16 de junio de 2016, al que ha tenido acceso Público, se acuerda que:

" Antonio Reguera, el Rambo del Bierzo, cumplirá su pena de Trabajos en Beneficio de la Comunidad en Cáritas de Cacabelos, a las órdenes del párroco Jesús Álvarez, el mismo sacerdote ultraconservador que movilizó a sus parroquianos y dedicó dos misas para pedir que el vecino neonazi no entrara en prisión". Y así fue.


FUENTE: publico.es
Joan Cantarero
Madrid - 30/08/2017

EEUU - KOREA DEL NORTE (VÍDEO)


30/8/17

TODO POR... DINERO

La Casa Real y el Gobierno siguen cortejando a dictadores en busca de nuevos negocios


El pasado 17 de julio, Ana Pastor entregó sin oposición el Collar de Isabel la Católica al tirano kazajo Nursultán Nazarbáyev, en nombre del rey Felipe VI.


Ana Pastor impone el collar de la Orden de Isabel la Católica 
al presidente de Kazajstán

“Si no lo hacen unos, lo van a hacer otros”, aseguraba el ministro de Economía, Luis de Guindos, el pasado mes de enero en defensa de la estrategia comercial de España y sus acuerdos con las petromonarquías del Golfo. Por esas mismas fechas, una semana después de que diera inicio la controvertida última visita del rey Felipe VI a Riad, De Guindos admitía abiertamente que ignoraba “las circunstancias específicas de Arabia Saudí en derechos humanos”. Y, lo que es todavía peor, que éstas pesaban poco o nada en el diseño de la llamada diplomacia económica de los Gobiernos del PP.

A todos los efectos, las afirmaciones del ministro eran una descripción casi perfecta de la lógica contradictoria que ha animado la actividad exterior de la Casa Real y la política comercial española durante las últimas legislaturas, basada –a imitación de la franquista– en el cortejo sistemático de las peores dictaduras del planeta y en la búsqueda de oportunidades de negocio en entornos geoeconómicos abiertamente hostiles a las formas más básicas de respeto a los derechos humanos, con especial predilección por el Magreb, Oriente Próximo y, mucho más recientemente, Asia Central.

Al igual que hicieran Aznar, Zapatero o, mucho antes, Franco, los gobiernos de Rajoy y la Casa Real no han reparado en medios –ni en escrúpulos– con la esperanza de ganar contratos cuestionables para España, siempre en el nombre de esos mismos razonamientos de que lo que es bueno para el empleo no debería ser puesto en entredicho con objeciones de tipo humanitario.

Aznar y Zapatero

Hace algo más de un mes, el dictador kazajo Nursultán Nazarbáyev pasó a formar parte de la lista de tiranos condecorados por España durante un acto organizado en Astaná, capital de Kazajistán. Fue la presidenta del Congreso, Ana Pastor, la que entregó personalmente al dictador el collar de la Orden de Isabel la Católica en nombre de Felipe VI, quien se la había concedido el 23 de junio.

A principios de 2014, el príncipe Harry de Inglaterra y su entonces novia Cressida Bonas fueron el blanco de las críticas de los tabloides británicos, tras una escapada romántica a una estación de esquí kazaja. Ni siquiera llegaron a entrevistarse con ningún miembro del Gobierno y, sin embargo, su popularidad cayó en picado porque sus compatriotas no entendían que hubieran elegido el territorio de una de las peores dictaduras del Asia Central para sus escarceos románticos.

Nada de eso sucedió en España el mes pasado, de modo que el zar kazajo Nazarbáyev –otro recordman mundial de las violaciones de derechos humanos– recibió la distinción en loor de multitudes, sin que una sola voz española se alzara en contra de semejante decisión. Lo cierto es que la concesión del collar era la culminación de una larga y meditada estrategia de apertura comercial española a los países más oprimidos por poderes autoritarios del Asia Central, inaugurada por un ministro socialista.

Juan Carlos I conversa con el presidente de Kazajistán, Nursultán Nazarbáyev. CASA REAL

En efecto, no fue el popular García-Margallo, sino Miguel Ángel Moratinos quien emprendió hace ahora diez años una visita por Uzbekistán y Kazajistán que terminó sentando las bases de las futuras relaciones españolas con los déspotas de las estepas asiáticas. 

"Hay que agradecer el acercamiento a los buenos oficios de Juan Carlos I y a su amistad con Nursultan Nazarbayev", dijeron en su día los comentaristas monárquicos de la época, asumiendo de ese modo que la principal función del rey es flirtear con los villanos. Además de a Narzabayev, Moratinos cortejó durante su primera visita a Asia Central, en junio de 2011, al despiadado autócrata bielorruso Alexandr Lukashenko y al uzbeko Islam Karimov, fallecido en septiembre de 2016, y, durante 27 años, cabeza visible de un régimen acusado de torturar, intimidar y asesinar a disidentes políticos.

Medalla del Mérito Civil para el tirano uzbeko Karimov

Islam Karimov (1938 - 2016)

Seis mil quinientos opositores fueron encarcelados por el régimen de Karimov y alguno fue incluso cocinado vivo. Entre 10.000 y 100.000 mujeres fueron esterilizadas hasta abril de 2012 mientras miles de niños eran forzados a trabajar en campos de algodón, lo que no fue óbice para que, también Karimov –incluido por la ONG Freedom House entre “lo peor de lo peor” de los villanos mundiales– recibiera el collar del Mérito Civil, una distinción creada en 1926 por el bisabuelo del rey de España (Alfonso XIII) para premiar "las virtudes cívicas de los funcionarios al servicio del Estado”.

Entre los mandatarios internacionales a los que se les ha otorgado el Collar o la Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil instituida por Alfonso XIII se hallan igualmente Sadam Hussein (collar, 1978); el ministro de Interior de Marruecos, Mohamed Hassad (gran cruz, 2015); y seis miembros de las casas reales de Kuwait, Abu Dhabi, Dubai y Emiratos Árabes Unidos (2008). Esta arraigada costumbre del Ministerio de Asuntos Exteriores español tiene su origen, en realidad, en el franquismo, que también otorgó siete distinciones del Mérito Civil a miembros de la realeza saudí, en el periodo comprendido entre 1962 y 1974, periodo durante el que comenzó a fraguarse la amistad de Juan Carlos I con las monarquías del Golfo.

Los amigos del Golfo

La Corona española está muy vinculada al Ibex 35 y a las petromonarquías


Las tres últimas visitas oficiales del reinado del rey emérito fueron, por este mismo orden, a Omán, Bahrein y Arabia Saudí, a donde ha regresado en varias ocasiones tras su retiro. Siete veces en total fueron visitados oficialmente los amigos wahabitas de Riad por Juan Carlos I, y muchas más el resto de vecinos de la península arábiga. Fueron con diferencia, los más frecuentados por el monarca.

Hasta el mismo día de hoy, Arabia Saudí ha seguido ocupando un lugar preferente en las agendas de la diplomacia económica de Margallo y del actual ministro, Alfonso Dastis. Lo que se halla en juego ahora es la adjudicación de la construcción de cinco corbetas a la empresa española Navantia. En última instancia, esta cuestión ha dividido incluso a los responsables de Podemos, cuya candidatura de Cádiz defiende abiertamente la concesión de ese contrato, en contra del criterio general de su partido y de otras formaciones como ERC o la CUP.

Tampoco la franquista tradición de cortejar a las monarquías absolutas del golfo Pérsico fue recuperada para España por los gobiernos populares. El presidente socialista José Luis Rodríguez Zapatero terminó su mandato concediendo en 2011 el collar de Isabel la Católica -una de las tres mayores distinciones civiles otorgadas por España- al jeque de Qatar Hamad Bin Khalifa al Thani y a la jequesa Mozhah Bint Nasser.

Juan Carlos I saludando a Gadafi. EFE

Durante ese mismo año, un informe elaborado por el CNI alertaba de que seis eran los principales países árabes que patrocinan a las comunidades de musulmanes españoles: Arabia Saudí, Kuwait, Qatar, Libia (la de Gadafi), Emiratos Árabes Unidos y Marruecos. Ese tipo de advertencias nunca disuadieron a los gobernantes españoles de modificar su posición respecto a los opulentos dictadores de Oriente.

Cheque en blanco

El principal problema que el Centro Nacional de Inteligencia detectó en aquel momento fue la total falta de control sobre esos flujos financieros. En otras palabras, ni los saudíes ni el resto de mecenas magrebíes y wahabitas tuvieron siempre claro a quién daban su dinero.


Ni los gobiernos socialistas, primero, ni el Partido Popular, después, pusieron entonces sobre la mesa de sus negociaciones económicas bilaterales con Arabia Saudí o Qatar el controvertido asunto de la financiación de las comunidades islámicas españolas, pese a que se sabía ya con absoluta certeza los vínculos y simpatías de ambos países con diferentes grupos de salafistas yihadistas. Por aquellas fechas comenzó a emitir desde Madrid la cadena Córdoba TV, gracias al dinero de otro wahabí de Arabia, y con las bendiciones del PP.

El collar y la gran cruz de Isabel la Católica fueron también concedidas por España en 1981 a otros cuatro miembros de la familia real y los gobiernos de Bahrein, EAU y Arabia Saudí. Otra distinción civil -la de la Orden de Carlos III- fue concedida en 2008 al sultán Bin Abdul Aziz al-Saud, príncipe heredero de Arabia Saudí, y al jeque Mohammed Bin Rashid Al Maktoum, emir de Dubái y vicepresidente de los Emiratos Árabes Unidos. Tres años antes, en 2005, le había sido otorgada al actual rey de Marruecos, Mohammed VI, y en 1981, al rey saudí Jalid bin Abdel Aziz. En enero de este año, fue Felipe VI quien se inclinó, con respeto reverente, ante el rey de Arabia Saudí para recibir la máxima distinción que otorga ese país.

En el peor de los casos, la perversidad intrínseca de la agenda exterior de buena parte de los estados occidentales ha prestado espléndidas coartadas a los gobiernos españoles para salir de pesca por las leoneras más sórdidas de poder autoritario del planeta. Una mano lava la otra.

El rey Felipe VI, condecorado en Arabia Saudí. EFE
El rey Felipe VI, condecorado en Arabia Saudí. EFE

FUENTE: publico.es
Erbil (Irak) - 27/08/2017



Y así sigue la cosa, como decía la famosa canción "La zamba del Che ", cantada por Víctor Jara, con letra de Javier Ortiz:  

"Que los derechos humanos 
los violan en todas partes, 
en América Latina, 
domingos, lunes y martes." 

III GUERRA MUNDIAL


III Guerra Mundial
(posibles bandos):

Aliados:
USA, Europa, Japón.

Dream Team:
Corea del Norte, Isis, el hijo de la Tomasa, Willy Toledo.

Kim Jong-un

LA INTERMINABLE GUERRA DE AFGANISTÁN

La interminable guerra en Afganistán se acaba de alargar


En Estados Unidos tenemos dos presidentes: el “verdadero Donald Trump” y el “Trump del teleprompter”. El verdadero Trump dice –y tuitea– lo que se le pasa por la mente. El del teleprompter lee desde una pantalla discursos que le preparan. Su voz suena forzada al leerlos, de forma tal que algunas personas comparan estos discursos con el video de un rehén. Las dos versiones de Trump han estado en plena exhibición últimamente, tanto en las declaraciones en las que afirmó la equivalencia moral entre los neonazis y los activistas antifascistas que se congregaron para oponerse a ellos, como en sus ataques a los medios de comunicación y las amenazas con cerrar el gobierno si no se construye su muro fronterizo.

Sin embargo, fue el anuncio que hizo en su discurso del lunes pasado, en el que el presidente Trump prometió que la guerra en Afganistán –la más larga en la historia estadounidense– iba a continuar, lo que podría ser lo más atemorizante de todo, asegurando más sufrimiento y muertes tanto para los soldados estadounidenses como para los civiles afganos.


Matthew Hoh, veterano de guerra, ex comandante de la Armada que luchó en Irak, dijo sobre el anuncio en una entrevista para Democracy Now!: “Fue una vil y desagradable demagogia basada en el miedo. Por supuesto, me entristece mucho que no hubiera nada en ese discurso más allá de la perspectiva de más muertes”.

Luego de combatir en Irak, Hoh trabajó en el Departamento de Estado estadounidense en Afganistán, cargo al que renunció en 2009. En su carta de renuncia de cuatro páginas, Hoh escribió: “No veo el valor ni el sentido de las continuas bajas de tropas estadounidenses ni de los gastos de recursos en apoyo al gobierno afgano en lo que, en realidad, es una guerra civil que lleva 35 años en curso... No creo que ninguna fuerza militar haya estado a cargo de una misión tan compleja, opaca y hercúlea como la que ha recibido el Ejército estadounidense en Afganistán”.


Donald Trump sostuvo durante mucho tiempo que Estados Unidos debería retirarse de Afganistán. En octubre de 2011, tuiteó: “Es hora de irse de Afganistán. Estamos construyendo carreteras y escuelas para gente que nos odia. No contempla nuestros intereses nacionales”. 

En enero de 2013, en una rara coincidencia de opinión con el entonces presidente Barack Obama, tuiteó: “Estoy de acuerdo con el presidente Obama en torno a Afganistán. Debemos hacer una rápida retirada. Para qué seguir desperdiciando nuestro dinero… ¡a reconstruir Estados Unidos!”. Más adelante, en las elecciones presidenciales de 2016, obtuvo la mayoría de los delegados del Colegio Electoral y, a pesar de perder el voto popular nacional por tres millones de votos, se convirtió en presidente del país.

El secretario de Defensa, general James Mattis,
apodado "Perro loco"

El lunes, en un discurso en la base militar Fort Myer, justo al lado del Cementerio Nacional de Arlington, el Trump del teleprompter dijo: “Poco después de asumir la presidencia, instruí al secretario de Defensa James Mattis y a mi equipo de seguridad nacional para que emprendieran una revisión exhaustiva de todas las opciones estratégicas en Afganistán y el sur de Asia”.

El círculo íntimo de Trump en la Casa Blanca se ha reducido a sus familiares y sus generales: el general John Kelly, jefe de Gabinete; el general James “Perro Loco” Mattis, secretario de Defensa y el teniente general H.R. McMaster, asesor de seguridad nacional. Después de una reunión en Camp David con estos generales y otros asesores militares, Trump anunció en su discurso de Fort Myer su compromiso de enviar miles de tropas más y de destinar decenas de miles de millones de dólares de los impuestos de los ciudadanos para la guerra en Afganistán.


Kathy Kelly, tal como Matthew Hoh, tiene una amplia experiencia en Afganistán. Como activista por la paz del grupo “Voces por la No-violencia Creativa” fue nominada en dos ocasiones para el Premio Nobel de la Paz. Ella está de acuerdo con Hoh respecto a que el gobierno de Afganistán, que cuenta con el respaldo de Estados Unidos, se ha venido abajo y no está ofreciendo ninguna seguridad contra los diversos caudillos de la guerra afganos.

En una entrevista para Democracy Now!, Kelly explicó: “Estados Unidos es uno más de los varios caudillos militares del país en este momento. Sin duda es el que está más armado y el que tiene mayor acceso a fondos, pero Estados Unidos no ha favorecido ningún tipo de gobierno que haya sido conveniente para el pueblo de Afganistán”.


El periódico The New York Times informó recientemente que el presidente Trump está siendo informalmente asesorado sobre Afganistán por el multimillonario inversionista Stephen Feinberg, propietario de la empresa contratista militar DynCorp, y que Trump podría estar procurando el control por parte de Estados Unidos de la riqueza mineral aún sin explotar de Afganistán, que se estima que tiene un valor de un billón de dólares. 

Kathy Kelly responde al respecto: “Afganistán es un país que necesita poder alimentar a su pueblo, no enviarlo a mazmorras y minas para trabajar como siervos. Para restaurar la infraestructura agrícola se debería volver a sembrar los huertos, limpiar los sistemas de riego, reponer los rebaños. Se necesitaría desvincular a la gente del comercio del opio. Esas son cosas que se podrían hacer”.


El presidente Trump debería reunirse un fin de semana en Camp David con activistas por la paz, así como con civiles afganos, que conocen su país y su sufrimiento mejor que nadie.

No obstante, si tenemos en cuenta lo que hemos aprendido sobre Donald Trump en los primeros siete meses de su presidencia –ya sea sobre el verdadero Trump o el hombre del teleprompter– podemos asumir que ese tipo de reunión no está en el guion.

El Pentágono presiona a Donald Trump para el envío de más tropas a Afganistán.
En la actualidad, más de 100.00 soldados estadounidenses combaten allí.

FUENTE: http://www.democracynow.org
Amy Goodman y Denis Moynihan
Traducción al español de Inés Coira
25/08/2017


Para ellos, me refiero a los inversores multimillonarios, la guerra tan solo es un negocio. Lo demás les importa una mierda.

LA PITADA AL REY




Me revienta mucho que haya gente que pite al Rey.
Ojalá no hubiese Rey, 
así se joderían porque no le podrían pitar. 

Anacleto Panceto

EN DOS PATADAS

Cómo arreglar esto en dos patadas


Las muy hispánicas y raciales reacciones de la caverna tuitera y mediática tras el atentado de Barcelona


“La tontería es infinitamente más fascinante que la inteligencia.
La inteligencia tiene sus límites, la tontería no.”
Claude Chabrol

Esta es una de las situaciones que requieren echar mano del consabido marciano. El marciano-testigo, me atrevería a apostar, se sorprendería de la especificidad hispana de las reacciones de los líderes de opinión (incluso, de ser un marciano mínimamente analítico, se sorprendería también de quienes son los líderes de opinión). Después de esas tragedias provocadas en los Estados Unidos de América por un tarado que entra a tiros en una escuela o en un supermercado, los debates ciudadanos que se generan suelen ser dos. Uno, sobre las razones que pueden llevar a un chico que siempre saludaba/estaba encerrado todo el día con el ordenador a matar a gente que, por lo general, no conocía. El otro, acerca de la conveniencia o no del prácticamente libre acceso de los ciudadanos estadounidenses a las armas de guerra. Aquí, sin embargo, uno de los focos del debate se centra en el mobiliario urbano, bolardos y macetas, como elemento de seguridad. Y en cuanto a las razones conductuales la conclusión es inmediata: se comportan así porque son musulmanes. 

La escritora de origen marroquí Najat El Hachmi, catalana desde los ocho años, decía en El Periódico: “Habrá insultos, pintadas, exabruptos de todo tipo, sí. Pero si los terroristas no representan a los musulmanes, ¿por qué los racistas van a representar a los que no lo son?”. En efecto, el problema grave no son los tontos con una tiza en las inmensas y libres paredes de las redes sociales, sino los que pintan ―en todos los aspectos― en los medios de comunicación.

Najat El Hachmi

Como describía Antón Losada, existen dos grados: “Resulta estremecedor comprobar con qué facilidad los charlatanes de la guerra santa señalan y amplían el círculo de sus enemigos: primeros son los terroristas, luego los islamistas, luego los musulmanes, luego todos esos progres y buenistas idiotas que no entienden que estamos en guerra, luego los gobiernos buenistas y sus votantes idiotas, luego los gobiernos que no movilizan a los ejércitos y empiezan a contraatacar y así hasta que al final sólo quedan ellos”. No se ha dejado ninguno de estos campos sin cubrir. Algún estratega probablemente ha decido que cuánto más amplio sea el enemigo, más fácil es dar en el blanco.

La línea José Manuel Soto

José Manuel Soto

Haciendo buena la Ley de Poe (Natham, no Edgar Allan), que asegura que, online, en la ausencia de un guiño o indicación que lo aclare, es difícil o imposible distinguir entre una postura ideológica extrema y la parodia de esa misma postura.

En el primer círculo del odio está la que podríamos llamar línea José Manuel Soto: “Esta gente viene a por nosotros, podemos pelear o esperar que nos maten, pasó el tiempo del buen rollito y el “Imagine”, yo prefiero pelear”. O “España es un país libre xq nuestros antepasados le echaron huevos y derrotaron al Islam, hoy los subvencionamos y pronto nos atropellarán”, proclamó el cantante.

Isabel San Sebastián

Detrás de este adalid del chucknorrismo patrio, que parece muy seguro de que ninguno de sus antepasados a lo largo de 800 años fue musulmán, forma filas gente de la que cabría esperar un conocimiento de la historia que fuese más allá de la Enciclopedia Álvarez, como la periodista Isabel San Sebastián (“Malditos islamistas, hijos de… ya os echamos de aquí y volveremos a hacerlo. España será occidental, libre y democrática").

Pero la cosa viene incluso de más lejos, al parecer. La Gaceta se retrotrae al pasado, en este caso a solo a tres años antes, para destacar el afilado análisis que manejaba Pérez Reverte en un artículo de entonces ―“Es la guerra santa, idiotas”― en el que reproducía las palabras de un amigo: “Todo me es familiar. Todo se repite, como se repite la Historia desde los tiempos de los turcos, Constantinopla y las Cruzadas. Incluso desde las Termópilas”. 

Ernest Hemingway

No sé si viene muy a cuento, pero quizá no vendría mal el consejo de Hemingway: “Intenta comprender, no eres un personaje de tragedia”. Pero, en general, a los comentaristas de guardia les preocupa, más que la política expansiva de la Persia de Jerjes I en el año 480 a.c., la de la Cataluña actual y sus gobernantes en ejercicio, tanto por acción como por omisión, en el pasado y en el futuro.

Por acción, en el pasado, al haber promovido las migraciones de países musulmanes y preterido las de origen castellano hablante. Lo aseguran, además del cantante-politólogo Soto, el periodista-animador Alfonso Rojo y el editorial de El Mundo del día 18, que pedía a las autoridades catalanas “reflexionar sobre una política de acogida en la que han primado a veces los intereses electoralistas, vinculados al independentismo, sobre la seguridad nacional”.

Alfonso Rojo

Como siempre hay gente sin demasiada comprensión lectora (o que esa fecha concreta no compró el periódico), tres días después el diario de Unidad Editorial lo dejaba más claro: “No podemos olvidar cómo el nacionalismo ha ido cebando una verdadera bomba al favorecer la llegada de inmigrantes de países musulmanes frente a los de países hispanohablantes, como parte de la estrategia de ruptura de España”. No he encontrado ninguna mención, ni entre los apasionados de la historia ni en los señaladores de culpables que no están en desiertos remotos ni en lejanas montañas, sobre qué podría haber distraído al gobierno de Aznar para que sucediese el 11M.

Frivolidad, coquetería y otros pecados capitales

Bieto Rubido

Bieito Rubido, el director a distancia de ABC, daba a la vez a la acción y a la omisión en una sola frase: “A Puigdemont le preocupa más su ‘procés’ que el yihadismo que puede arruinar la economía de Catalunya”. Con su habilidad para el subtexto, Rubido dejaba caer un argumento que posiblemente suponía demoledor para la sociedad catalana: la economía.

Con más seny, y más invocaciones a la tradición liberal, el famoso análisis de Lluis Bassets (El fin de la frivolidad) venía a decir lo mismo: “El atropello masivo y mortal demuestra que no caben las metáforas ni las licencias literarias a la hora de las culpabilizaciones políticas y sociales. Las expresiones y pintadas que designan a los turistas como terroristas han encontrado un eco siniestro en el atentado de ayer”.

Hermann Tersch

Para sensibilidades más romas, Hermann Tertsch trataba el asunto a pecho descubierto: “Hagan el pino, llámenme de todo y quémenme en efigie o persona pero es la verdad. Es turismofobia en el amplio sentido. La CUP a lo bestia”. Arcadi Espada ensanchaba el campo de la culpabilidad nacionalista (aka “los coquetos”): “Toda esta gentecilla, entreverada de gentuza, lleva años coqueteando por activa o pasiva con la violencia: desobedeciendo, desacatando, chuleando la paz, que es la ley. Si el Cuerpo Nacional de Policía lo permite, quiero compartir los 13 muertos y 80 heridos con todos y cada uno de esos intolerables coquetos”.

Federico Jiménez Losantos

El padre de todos los comentaristas, Jiménez Losantos, no libra ni a Mariano Rajoy aka “El Manso” de la relación de cómplices y/o inanes: “¿Qué creen los que aplaudían, aún no sé por qué, junto a los golpistas y los enemigos del turismo, que los que defienden pactar con la ETA y dinamitar España, Europa y el Capitalismo, no van a decir que en una Cataluña independiente será más fácil que el Islam deje de matar? Lo dirán y, con la ayuda de los aplaudidores, Pablenín al frente, lo harán”, dice con su finezza y su destreza nominativa habituales.

Miguel Ángel Mellado

Como dándole la razón, y ajeno a las recomendaciones de sus colegas de dar rodeos literarios, trivializar y otras fruslerías, el director adjunto de El Español, Miguel Ángel Mellado, hace un Houellebecq. Inspirándose en Sumisión, la novela en la que el escritor francés dibuja una Francia futura gobernada por un partido musulmán, Mellado describe la Gran Mezquita erigida sobre lo que fue plaza de toros Monumental, entre otras distopías: “Hoy, en este calurosísimo verano de 2037, Ripoll es lugar de peregrinaje, pero para rendir tributo a los hermanos Moussa y Driss Oukabir…”. Quizá para compensar ese resbalón en la futilidad, el artículo se titula “Mamones, el enemigo no era Machado, sino Moussa”.

A estas alturas, nuestro marciano de referencia debería estar un tanto desorientado. ¿Hay tantos y tan variados culpables? ¿La guerra es inminente o ya estamos en ella? Wassir Nasr, que no es un todólogo, sino un especialista francés en yihadismo, aseguraba el 19 de agosto en una entrevista en L’Obs que “España, como Francia o Bélgica antes, no es para el ISIS otra cosa que uno de los países de la coalición, y Barcelona es solo un lugar como otro donde causar muchas víctimas occidentales… 

Wassir Nasr

En última instancia, es cierto que en la escatología milenarista del Estado Islámico, golpear el territorio de Al Andalus es simbólico. Pero no tome a los líderes de estos ataques por idiotas. El objetivo no es ganar Al Andalus o hacer de Barcelona la nueva Raqqa. Desarrollan una guerra estratégica y conocen la diferencia entre la comunicación y conseguir sus objetivos de guerra”.

Un veterano en conflictos internacionales, Ramón Lobo, también remaba contra corriente en Infolibre: “Despreciar al enemigo, considerarlo bárbaro o tonto, es el camino más fácil hacia la derrota. Para vencer es necesario aceptar que nos enfrentamos a personas inteligentes que tienen un plan y unas razones. Atacan a nuestros civiles porque sienten que nosotros bombardeamos a los suyos. Atentan porque sienten que atentamos contra sus países. Es necesario enfrentar su narrativa con otra narrativa. No bastan las declaraciones pomposas, por lo general, huecas”. Y si alguien en el futuro trata de entender aquel verano catalán de 2017 valiéndose de los medios de comunicación de la época, quizá se encuentre con lo que mencionaba este martes en La Voz de Galicia el historiador Lourenzo Fernández Prieto: el titular de algunos periódicos europeos, el 2 de septiembre de 1939, decía “Polonia ataca a Alemania”.

 Alemania invade Polonia el 1 de septiembre de 1939 
sin declaración de guerra previa

FUENTE: ctxt.es
Xosé Manuel Pereiro
23/08/2017
 

Les ruego que se fijen en las miradas de los personajes que ilustran esta entrada. Comparen los rotulado en azul con los rotulados en negro, y saquen sus propias conclusiones. Amén.